Si se examina con cuidado el termino cargo diferido, podemos decir que lo que se pretende es diferir el cargo a resultados. Cargar a los resultados significa disminuir las utilidades, o sea que un cargo diferido es un gasto diferido.
Pero, si nos apegamos estrictamente al termino, serian cargos diferidos tanto los inventarios que en el futuro se hayan de cargar al costo de ventas (o sea el cargo a resultados) como también los activos fijos que en el futuro se hayan de cargar a los resultados por razón de la depreciación.
En la practica los cargos diferidos incluyen, entre otros conceptos los gastos de organización, los pagos anticipados a mas de un año y los descuentos en venta de obligaciones.
Algunos expertos en materia fiscal proponen que los gastos de organizacion se consideren como deducciones fiscales que se habrían de amortizar en años siguientes conforme lo establece la ley. La verdad es que las empresas se organizan tanto de un punto de vista legal como administrativo y contable.
Un sistema contable habrá de ser obsoleto al cabo de cierto tiempo. Sin embargo, es innegable que tales costos de organizacion constituyen activos.
