De una lista larga de gerentes que respondieron a esta pregunta, se tienen algunos tips que podrían ayudar a los recién graduados que enfrentan el mercado laboral más deprimido de las últimas décadas:
- Si no se siente bien haciéndo algo, no lo haga. El descenso ético comienza con “sólo esta vez” y cuando se quiere volver a empezar ya el camino es muy resbaladizo.
- Lea todo lo relativo al campo de los negocios que llegue a sus manos. Si aprende las reglas, la jerga del área y las tendencias actuales, se convertirá en experto, será ascendido y obtendrá más ingresos.
- No se involucre en la política de la oficina ni en las comparaciones desventuradas que se hacen los empleados al tomar café.
- Trate de que nada se interponga entre usted y su trabajo, al menos los primeros seis meses. Las primeras impresiones valen más que nada. Edifique su reputación de empleado preocupado por su empleo.
- Tenga amigos en el trabajo pero no deje que se antepongan a sus obligaciones.
- Si le toca viajar como parte del trabajo, pregúntese al comprar zapatos: “¿podré correr por el aeropuerto si me compro estos?”.
- No tema preguntar, la gente se sentirá complacida de que la busque para obtener algún consejo.
- Encuentre un mentor. Hay mucho que aprender cuando se empieza, por lo tanto esta figura puede ayudarle a buscar las respuestas.
- No importa cuál es su área de interés, invierta algunos años en vender algo, esta experiencia le dará confianza en sí mismo y humildad.
- Vístase para el trabajo que quiere, no necesariamente para el que tiene. Así cuando aparezca la gran oportunidad, no será difícil que lo vean como una persona que puede ser tomada en serio.
- No dependa de recompensas externas.
- No deje que otra persona en la empresa guíe su carrera.
- Estudie a las personas exitosas y analice cómo lograron posicionarse, qué elecciones hicieron y qué obstáculos sortearon.
