"Quien se prenda de la práctica sin ciencia; es cual piloto que se embarca sin timón ni brújula. La practica ha de ser siempre edificada sobre cabal teoría." Leonardo Da Vinci
El control interno es un plan en donde se preveen todas las medidas administrativas dentro de la entidad para el logro de los objetivos; es un plan de la organización donde se establecen las políticas y procedimientos que persigue la entidad con el fin de salvaguardar los recursos con que cuenta, verificar la exactitud y veracidad de la información para promover la eficiencia en la operaciones y estimular la aplicación de las políticas para el logro de metas y objetivos programados.
La efectividad del control interno depende en gran medida de la integridad y valores éticos del personal que diseña, administra y vigila el control interno de la organización.
El control interno debe tener una estructura básica dentro de la organización; esto consiste en tener un ambiente de control, en donde se combinen las políticas y procedimientos, de tal manera que se evaluen los riesgos, identificando, analizando y administrándolos para que no desvirtúen los objetivos de la empresa.
El establecimiento de procedimientos de control sería con el fin de proporcionar una seguridad razonable de los objetivos de la organización.
Estos procedimientos y controles deberan ser definidos por la direccion general y su aplicacion y vigilancia por el area adiministrativa. En conjunto deberán observar si estos estan generando los objetivos establecidos y, en caso de no ser así, dictar las medidas necesarias para que así sea.
Es importante resaltar que los factores externos, afectan de manera considerable el comportamiento interno de la empresa y, -en virtud de esto- el control interno se debe adecuar al mismo.
Como se podrá observar, el control interno es de vital importancia para la optimización de la operaciones y el crecimiento del negocio, tanto en lo administrativo como en la operación; los beneficios van desde el accionista hasta el propio cliente ya que tendrá, este último, un grado de confianza sobre la entidad y eso prevalecerá en el tiempo generando, consecuentemente, utilidades y crecimiento interno en la organización.