Hay ocasiones en que una empresa necesita de equipo de transporte para realizar las funciones necesarias para la consecución de su operación, pero, por falta de crédito o solvencia de la misma, no puede adquirir el equipo que necesita.
Es aquí cuando hay que echar mano de los amigos, en este caso: las empresas filiales.
Así es, cuando una empresa carece de lineas de crédito porque esta iniciando operaciones o porque su solvencia no le permite ser sujeto de crédito, se puede negociar con las filiales para que ellas realicen la operación de la compra del equipo requerido -vía financiamiento- y, por medio de un contrato de arrendamiento, hacerse del equipo que necesitan.
El contrato de arrendamiento de equipo es la manera mas sencilla y práctica de formalizar la operación entre las filiales y aprovechar sus ventajas, ya que la arrendadora lo puede deducir vía depreciación -pues lo mantiene en su activo fijo- y la arrendataria puede hacer lo mismo, mandando al gasto el importe que esta pagando.
A continuación se presenta un machote de este tipo de contratos que son fundamentales para poder hacer que la operación sea clara y legal ante cualquier autoridad.
Cabe aclarar que este procedimiento se puede aplicar para cualquier activo fijo que se necesite para la operación de una empresa.
El formato lo podran bajar desde el siguiente enlace: Contrato de arrendamiento de Vehículo