jueves, 10 de febrero de 2011

Los errores de las empresas familiares



Cuando se inicia un negocio, parte de la intención se encuentra en construir un patrimonio personal, pero después de algún tiempo -en alguno casos- cambia esa perspectiva y lo que se desea es que ese patrimonio sea para nuestros hijos.

Y es ahí donde el objetivo inicial si bien no cambia en su forma si se altera en su fondo, pues no es lo mismo trabajar para uno mismo que hacerlo para la familia.

Cuando el objetivo final es canjeado por hacer de un negocio propio uno familiar las formas tienen que cambiar, no pueden seguir siendo las mismas pues aunque sean familia será necesario que quien se  vaya a integrarse a la empresa se prepare adecuadamente, al igual que el dueño de la misma pues su mentalidad también debe cambiar.

Recientemente recibí en mi correo un excelente articulo que habla sobre el tema, el cual transcribo a continuación:


Los 10 “pecados mortales” de las empresas familiares

Por Alfonso Bolio Arciniega*

En México entre 95 y 98% de las empresas son familiares; la mayoría enfrenta problemas para asegurar su permanencia y lograr transitar de una generación a otra. Según datos estadísticos, de seis empresas en primera generación, dos pasan a segunda, y sólo una de ellas llega a la tercera.

A continuación “pecados mortales” conductuales:

1) Ignorancia: En la empresa familiar suele confundirse el concepto de “propiedad” con la capacidad de dirigir, la cual requiere de una serie de cualidades, buenas prácticas, estudio y mayor preparación. Para dirigir una empresa hay que estar inmerso y presente en ella.

2) Irresponsabilidad: Se da cuando se ignoran las leyes del mercado, pues ello puede devenir en prácticas inadecuadas como la remuneración a los familiares, lo que puede traer como consecuencia falsear costos, dejar de ser competitivos, etc.

3) Engaño: Cuando se confunden los lazos afectivos con las actividades laborales. Se deben hacer las cosas en el lugar que corresponde: actuar como padres en casa, y como jefes en la empresa.

4) Mentira: Al presentarse retrasos innecesarios en la sucesión en la empresa, es decir, se descuida la formación de uno o varios sucesores que cuentan con las aptitudes requeridas para desempeñarse como tales en un futuro.

5) Ocultamiento de conflictos: Es sano recordar la existencia de los conflictos y hay que permitir que surjan para resolverlos; es fundamental el manejo adecuado de los mismos. Hay que ponerse de acuerdo para estar de acuerdo.

6) Negligencia: Cuando se permite el deterioro de la comunicación en la organización. Es importante ser competente, congruente, coherente, compasivo y comunicativo.

7) Simplismo: Consiste en faltar a la diversidad de roles que cada elemento puede desempeñar en las diferentes actividades que tienen los miembros de la familia (accionista, familiar, empleado, directivo, miembro del Consejo de Administración y del Consejo Familiar), y procurar vivir el rol del momento.

8) Superficialidad: Descuidar la transmisión de valores fundacionales como afán de logro, austeridad, ahorro, sueños, visión a largo plazo. Hay que estudiar las cualidades del fundador del negocio para que se pueda seguir su ejemplo.

9) Candidez: Consiste en decidir lo que conviene, dejar las cosas en orden y ser realista.

10) Soberbia: Creer que la familia empresaria, sólo por serlo, no incurrirá en falta. No hay vacuna inmunizadora para ello. “Empresa” y “familia” deben ser conceptos entendidos de forma separada para evitar confusiones al interior de la organización y entender que a su interior existen tres sistemas: familia, empresa y propiedad.

Estos sistemas, a su vez, incluyen tres enfoques en las empresas familiares:
- legal: Testamentos, fideicomisos, usufructos, pago de impuestos, regímenes matrimoniales, acciones, etcétera.
-  normativo: Reglas de funcionamiento que quedan plasmadas en un documento privado que se le denomina de diferentes maneras tales como código familiar, convenio marco, carta magna, etc.
- psicológico: Sentimientos, motivaciones, actitudes, deseos, simpatía, resentimientos, envidia, conflictos, celos, etcétera..

*El autor es director general del IPADE, profesor de las Áreas Académicas de Factor Humano y Empresa-Familia.
Related Posts with Thumbnails