En cierta olimpiada, la medalla de oro en la lucha olímpica sería disputada entre un ruso y un mexicano: “el Chaquiras”.
Un día antes de la final, el entrenador del Chaquiras le advierte: “Este pinche ruso tiene una llave especial, creada por él mismo: “la Pretzel”.
Todos a los que se las ha aplicado tuvieron que rendirse... incluso tuvieron que ser llevados al hospital, porque no hay escapatoria.
Así que, por ningún motivo dejes que te la aplique. “¡Si te coge, ahí termina todo!”
Llegó el día de la gran final, esperada en todo México y el encuentro comienza.
El Chaquiras y el ruso dan vueltas y más vueltas, tratando de encontrar el mejor modo de atacarse.
En eso, el ruso ataca y le aplica al Chaquiras la temida Pretzel… uuaaghh!!! ,
Los comentaristas de tv, los asistentes a la gran final, y la multitud que seguía esa medalla de oro tan esperada se decepcionan y el entrenador, que no puede mirar, se cubre la cara pensando ¡ya valió madres!.
De pronto, el gentío grita, asombrada!!!
El entrenador mira y ve sin poder creerlo que el Chaquiras levanta al pinche ruso y lo tumba.
¡Espaldas planas!!!!
¡Y el Chaquiras gana la medalla de oro!!!
El árbitro lo declara vencedor con la medalla de oro y la multitud de México ruge!!!
Más tarde, en los vestidores, el entrenador del Chaquiras le pregunta:
“Oyeme cabrón ¿cómo le hiciste para salirte de la Pretzel? ¡Hasta ahora nadie lo ha podido hacer, y menos quitarle lo invicto al pinche ruso!!!”
Y el Chaquiras comenta: “Cuando me aplicó la Pretzel ya iba a rendirme. Pero, de pronto, abrí los ojos y veo un par de bolas. En aquel momento, con las últimas fuerzas que me quedaban, estiré mi cuello lo más que podía y mordí esas bolas tan fuerte como pude”.
-“¿Y, entonces?” pregunta el entrenador
-“Sabe una cosa, entrenador: ¡No tiene la menor idea de la fuerza que uno adquiere cuando se muerde uno mismo los huevos!!!!"
Moraleja...
Pa' lograr lo imposible hay que morderse un huevo y si es necesario los dos...