La mercadotecnia siempre ha sido fundamental para la promoción de un producto y es ahí donde las companías especializadas se convierten en buenas o mediocres.
Siempre la originalidad y la versatilidad del mensaje es lo que lo hace bueno, malo o intrascendente, no importa que en el mismo se hieran algunas susceptibilidades, como en el siguiente caso:
El dueño de una empresa familiar -dedicada a la fabricación de clavos-, ante su inesperado éxito, decide expandir el negocio; para lo anterior contrata los servicios de una agencia de publicidad que se encargue de elaborar un comercial que apoye los planes de expansión
- Quiero que hagan un comercial para mi negocio, “Clavos Martínez”, les comentó.- Muy bien señor, ¿qué le gustaría en el comercial?.- Lo que ustedes crean que sea bueno, lo quiero en la television el próximo domingo, aquí está el dinero.-Ok, su comercial sale el Domingo a las 12:00 del mediodia.
Se llega el Domingo y el señor todo ilusionado enciende la tele:
Se ve un atardecer, en eso sale Jesús en la cruz y un guardia dice: “¡con Clavos Martínez no se zafa nada!”
Al ver eso, el señor muy molesto llama al dueño de la agencia y les grita furioso:
-No la chinguen, ¡van a pensar que estoy en contra de la iglesia y no es así!, quiero que cambien el comercial.
-Ok señor, sale el jueves en la tarde, le contesta el director de la agencia.
Se llega el jueves y el señor prende la tele…
Atardecia... en eso pasa Jesús corriendo a todo lo que da con todos los guardias atrás de él… en eso dice uno de ellos: “¡Te dije que lo claváramos con Clavos Martínez!