Viajar por trabajo es algo muy agotador. La mayoría de la gente vuelve a casa sintiéndose agotada por demoras en los vuelos, por no dormir bien, por comer en exceso y por sobrecarga de trabajo. Esto sin contar la soledad y la falta de la familia.
Pero si esos viajes son inevitables, lo mejor es prepararse –y preparar a la familia o seres queridos- para que esa ausencia por motivos laborales sea lo menos dolorosa posible.
Pruebe estas tres cosas que le ayudarán cuando está en viaje de trabajo: