De los niños hay que aprender muchas cosas, y una de ellas es la táctica en la negociación, en las que por lo general caemos los mayores.
Negocian la acción de hacer -o dejar de hacer- algo a cambio de eso que les interesa.
Nos enseñan que hay muchas tácticas de presión en cada negociación, que sólo dan resultado a corto plazo y que se pueden volver rápidamente en contra de quien las aplica.
En una negociación, el chantaje ligero, la amenaza, la ocultación de información o la manipulación son tácticas utilizadas para conseguir lo que se desea.