Ya se comentaba, en otro post, que uno de los método para actualizar los rubros de Inventarios y Activos Fijos era el de Reposición y que uno de los procedimientos para hacerlo era mediante un valuador independiente.
Si bien la actualizacion es factible tanto en los inventarios como en los activos fijos, la practica nos dice que son estos últimos los que se actualizan -mas comunmente- por medio de un avalúo, por lo tanto, y para evitar posibles confusiones, el tema irá direccionado a la actualización de los activos fijos por medio de un avalúo.
Pues bien, el avalúo por medio de un perito, implica la determinación del valor de reposición de los activos en cuestión, mediante un estudio técnico practicado por valuadores independientes de competencia acreditada.
El estudio técnico debe satisfacer, por lo menos, los requisitos que se enuncian a continuación:
a) Proporcionar los siguientes datos correspondientes a los distintos bienes:
-Valor de reposición nuevo. Estimación de costo para adquirir en el momento un bien semejante al que esta en uso, listo para permitir mantener la capacidad operativa equivalente.
-Valor Neto de Reposición. Es la diferencia entre el valor de reposición nuevo y el demerito provocado principalmente por el uso y obsolescencia.
-Vida Útil Remanente. Estimación del periodo de tiempo en el que el activo puede servir a la empresa.
-Valor de Desecho. Estimación del valor final del activo una vez terminada su vida útil, cuando existan elementos suficientes que indiquen su posible existencia.
b) Todos los bienes de una misma clase y características comunes deben tratarse en forma congruente.
c) El cálculo técnico de la actualización no debe producir solamente cifras globales, sino que debe asignar valores específicos a los distintos bienes en existencia o a los distintos grupos de bienes homogéneos.
d) Debe existir congruencia entre las políticas de capitalización para determinar el valor histórico de los activos y las partidas que se incorporan para determinar el monto del avalúo.
En los ejercicios posteriores a la actualización por medio del avalúo se podrán ajustar las cifras registradas utilizando índices específicos proporcionados por los propios valuadores.
Excepcionalmente las empresas podrán determinar, por si mismas, el valor neto de reposición de sus activos cuando dispongan de elementos objetivos y verificables para hacerlo.