En todas las empresas, o entes económicos, es muy común ver que los robos de los empleados -hormiga o a gran escala- se estén dando, y esto se debe, sin lugar a dudas, a que son ellos los que conocen y saben el funcionamiento operacional de la misma.
Por lo general esto se inicia no por la oportunidad sino por alguna especie de venganza hacia la organización o sus dirigentes.
Una encuesta revela que las 30 cadenas de establecimientos minoristas mas grandes de Estados Unidos han registrado perdidas por mas de $ 5,000 millones de dólares por hurtos por parte de los empleados y asaltos. De dicho importe apenas el 3.45% se llego a recuperar.
Los establecimientos aprendieron a mas de 600,000 ladrones y a casi 78,000 empleados deshonestos. Casi uno de cada 27 empleados fue capturado cuando robaba a su patrón.
Estadísticas revelan que cada empleado deshonesto roba aproximadamente 8 veces mas el monto que obtiene un grupo de ladrones tras un asalto a una tienda, $ 900 y $ 114 respectivamente, y esto se debe, seguramente, a que el empleado tiene mas tiempo para hacerlo que un fugaz ladrón callejero.
El estudio solo informa de los datos estadísticos de lo que paso, sin embargo en ningún lado sugiere las medidas para evitarlo, dentro de las cuales bien podría ser darle al empleado una remuneración satisfactoria que lo comprometa a cuidar los bienes de la empresa en ves de apropiarse de ellos.
Fuente: Jack l Hayes International, Fourteenth Annual Retail Theft Survey.