“No importa que me roben, con que me hagan ganar es suficiente.”
Era la frase que me decía el Director -y dueño- de una empresa, para la que trabajaba hace un tiempo, cuando le comentaba que la gente le estaba haciendo trampas a la hora de reportar las ventas y los gastos de las sucursales.
Mucho se tardó en tomar en serio mis comentarios y cuando quiso poner medidas de control se dió cuenta que el problema era tan grande que habría necesidad de despedir al 75 % de la plantilla gerencial de las sucursales.
El fraude es un problema que se da si no hay la debida vigilancia y candados en la administración; suele ser tan fácil cometerlos si se carece de los elementos para detectaro. No es que se deba poner a un auditor a cada persona responsable del flujo, con definir candados que lo detecten por si solos es mas que suficiente.
En el siguiente enlace se presenta un archivo pdf del Lic Johnny Alpizar del prestigiado despacho Ernest & Young donde comenta abundantemente este tema: El Fraude.pdf