Entre
más alto esté en la organización, menos
probabilidades tendrá de recibir retroalimentación sobre sus ideas, rendimiento
o estrategia.
Si
usted es el jefe debe saber que es importante contar con la información
suficiente para tomar buenas decisiones y para saber seleccionar la mejor
estrategia para el éxito de la organización. Si esto no es así, su barco podría
llegar al punto equivocado o lo que es peor, podría hundirse.
En
resumen, para que usted mejore, necesita el apoyo de los demás, con información
y con acción.
He
aquí cómo hacerlo:
- Pregunte
constantemente. No se limite a preguntar hasta cuando sea el tiempo de
revisión, ni asuma que los miembros de su equipo ya saben lo que tienen que
hacer. Pregunte hasta que tanto usted como su equipo estén seguros de que se
está haciendo de la manera correcta.
- Retire
responsabilidades. Hacerle ver a la gente que es responsable de un proyecto - o
de algunas funciones- es una manera de recibir retroalimentación
permanentemente. Muestre interés y demuestre que es receptivo.
- Actúe
en consecuencia. Si alguien es lo
suficientemente valiente como para decirle algo, reconózcaselo. Muestra a todos
que usted recibe bien las críticas y que puede cambiar su comportamiento como
resultado.