Un estudio realizado recientemente por una prestigiada universidad norteamericana, referente a los diferentes tipos de administración que se dan en las empresas, revelo que lo que se aplica realmente en la actualidad no es tanto de los que se indican en los libros sino mas bien una mutación de los mismos.
Lo que se obtuvo de este estudio fue una clasificación de los diferentes tipos de administración que las empresas practican. No son grupos excluyentes, pues esos tipos de administración se presentan, en muchas ocasiones y a conveniencia, combinados en la mayoría de las empresas.
• Montessori.
Sistema muy conocido por ser un generador de caos pues se caracteriza porque cada miembro de la empresa hace lo que quiere, cuando lo desea. Por ejemplo, el jefe o gerente de jurídico interviene en labores publicitarias, o el gerente de almacén decide cambiar las políticas de contabilidad. La idea en este tipo de administración es dar libertad a las personas para hacer lo que quieran, sin límites ni restricciones y consecuentemente es generadora de la ley del mas fuerte.
• Administración por crisis.
Un sistema de comodidad, que consiste en no tomar decisiones ni realizar acciones preventivas para problemas y crisis futuras. Todos en empresa sigue trabajando como si nada cambiara en el entorno hasta que la crisis se presenta y entonces se preocupan de cómo enfrentarla. Este tipo de administración tiene la ventaja de darle al ejecutivo períodos de tranquilidad, en los que no hay estrés y puede inclusive darse tiempo para disfrutar de las relaciones publicas (visitas a clientes, comidas, cursos) y al llegar la crisis, siempre tiene la opción de salir de la empresa y entrar a otra en la que no exista crisis.
• Administración por sí-logismo.
Sistema basado en la ciencia (logos) de decir sí a todo, claro, siempre que eso aplique a lo dicho por el superior inmediato. El problema es que impide las ideas de los empleados pues siempre hay una sola fuente de iniciativas, las del Jefe. La gran ventaja de este tipo de administración para el subordinado es pasar el día sin complicaciones pues su único deber es seguir las instrucciones superiores y si el Jefe no da instrucciones, no hay trabajo y se puede salir a las relaciones publicas.
• Administración por oratoria.
En este sistema, sube en jerarquía aquél que mejor domine y use sus dones verbales, pero claro, siempre y cuando ellas estén destinadas a ensalzar al superior máximo. Suelen usarse expresiones como "gran visión comercial", "enorme capacidad de negociar" y otras similares, no importa que lo que haga o decida sea una reverenda estupidez. Siempre hay para él los más grandes elogios, especialmente por el uso de sus las relaciones publicas.
• Administración por gemido.
Este tipo de administración está sustentado en la queja asignada a factores externos ajenos al control propio. Si bajan las ventas, esa realidad es causada por cuestiones como la situación económica, la actividad de la competencia, las tasas de interés, la falta de colaboración de los intermediarios, cualquier cosa antes que aceptar responsabilidades personales.
• Administración por voto popular.
Sistema consistente en la convocación permanente de juntas en las que se pida a todos los asistentes sugerir acciones para tomar decisiones, cuya principal característica sea, que no causen ni el menor malestar a alguien. Su objetivo es lograr un equipo ejecutivo en el que todos sienten que tienen razón y a nadie se le da contra. Las decisiones, desde luego son intrascendentes e inadecuadas, pero se tiene la ventaja de evitar lastimar a alguno de los ejecutivos, quienes quieren seguir con sus relaciones publicas.
• Administración en pasillos.
Combinación de varios tipos de administración donde predomina el control de la persuasión y se caracteriza por generar las decisiones grandes del negocio en los pasillos y no en las oficinas, ni en las salas de junta. Las reuniones se siguen realizando pero en ellas solo se toman decisiones intrascendentes.
• Administración por caos.
Administración caracterizada por decisiones diarias y numerosas, muchas veces opuestas y hasta contradictorias. Por ser numerosas, se corre el riesgo de no darles seguimiento. La gran ventaja de este sistema es la novedad, pues el ejecutivo siempre tiene cosas diferentes que hacer, lo que es un gran tema de conversación en las reuniones post-office.
• Administración por contienda.
Sistema popular y de actualidad y muy simple de aplicar, consiste en realizar acciones contrarias a lo que intenta hacer otro ejecutivo del mismo nivel.¨Por ejemplo, si alguien propone, lanzar un nuevo producto, al menos uno de los ejecutivos hace todo lo posible por evitar ese lanzamiento. Estas peleas son una gran tema de conversación en las reuniones post-office y permiten la formación de equipos rivales.
• Administracion por sentimientos.
Sistema utilizado y/o aplicado principalmente los lunes de cada semana, y su intensidad depende de como le haya ido al jefe, administrador o dueño de la empresa durante el fin de semana. Un indicativo que nos podría poner en alerta es si el susodicho es aficionado a practicar o seguir algún deporte y los resultados no fueron muy favorables.