La investigación presentada ante el Senado Estadounidense destaca que La Comisión Nacional Bancaria y de Valores de México, habría señalado desde el 2002 problemas de la filial mexicana de HSBC México para implementar controles de prevención de lavado de dinero; y señala que en el 2007, el organismo emitió una recomendación a la institución financiera y a su matriz sobre el asunto.