"Un director inepto no es un tuerto en tierra de ciegos, es un ciego que no sabe que lo es".
En una platica de hace días, se hacia una analogía entre la empresa y un avión, la cual considero es de lo mas apropiada para ejemplificar lo que pasaría en circunstancias no normales:
Están todos los pasajeros en la sala de embarque esperando la salida del vuelo cuando de repente llega el copiloto impecablemente uniformado, con anteojos oscuros y un bastón blanco tanteando el camino.
La empleada de la compañía aclara que, si bien es ciego, es el mejor copiloto que tiene la Empresa.
Al poco rato llega el piloto, con el uniforme impecable, anteojos oscuros y un bastón blanco asistido por dos azafatas.
La encargada de la sala aclara que, también, el piloto es ciego, pero que es el mejor piloto que tiene la Compañía y que, junto con el copiloto, hacen la dupla más experimentada.
Con todos a bordo, el avión comienza a carretear, tomando cada vez más velocidad y con los pasajeros aterrorizados.
El avión sigue tomando velocidad pero no despega… continúa la carrera y sigue en tierra.
Cada vez el final de pista está más cerca y en una explosión de histeria general los pasajeros comienzan a gritar como poseídos!AAAAAAHHHHH!!!!!!
En ese momento el avión, milagrosamente toma altura … entonces el piloto le dice al copiloto…
- El día que los pasajeros no griten, ¡¡¡ Nos damos en la madre...... !!!!!!
Moraleja:
Una empresa dirigida por ciegos o personas que no quieren ver la realidad difícilmente levantara el vuelo, aunque todos a su alrededor se la pasen gritándole para que lo haga.